jueves, 2 de febrero de 2006

¡Energía extra!

¡Qué bien sienta una desconexión de la rutina! Han sido 2 días de olvido total de mis responsabilidades pero me parece como si hubiese sido una semana. Cambiar por unos días la pregunta de ¿Hoy que tengo que hacer? por la de ¿Hoy que quiero hacer, que me apetece? es una cura interior importante. El preguntarte; ¿que te apetece? ¿que necesitas hoy para ser feliz, para sentirte bien? y luego proporcionártelo. Tal vez sea algo sin importancia, o tal vez sea algo grande. Pero al fin y al cabo algo que te añadirá felicidad.
Nos educan para hacer felices a los demás y parece que ocuparnos de nosotr@s mism@s es un acto egoísta, pero yo creo que es lo contrario; cuando te preocupas de ti mism@, cuando trabajas tu interior y te sientes bien, es en este momento cuando te sientes preparad@ para dar a los demás, para hacer feliz a aquellas personas con las que entras en contacto en tu día a día.
Esto se lo explico a mi hijo de siete años de esta forma, aunque seas generoso si no tienes caramelos no los podrás dar, primero tienes que ocuparte de conseguir tener caramelos tu y después de compartirlos, pero siempre quedándote alguno para ti, pues tu eres tan merecedor de ellos como los demás.
Primero hemos de sentirnos bien, de tener amor en nosotr@s para luego poderlo transmitir. Y este sentirnos bien empieza por cuidarnos y mimarnos. Si esto significa romper por unos días con todo, pues bienvenido sea.
Ahora me toca recuperar parte de mi trabajo y trabajar más intensamente, pero como tengo energías extras no me importa.
¡Ah! tal vez algún día cuente todas las normas que me he saltado estos días, ha sido muy divertido. :-)

No hay comentarios:

Publicar un comentario