Rutina y sueños...

Mientras que contabilizo facturas sueño con irme lejos de aquí... sueño con un lugar en el que las energías vibren al unísono con las mías... sueño con un lugar en el que poder desarrollar toda mi creatividad... sueño con un lugar libre de corsés, libre de creencias, de ego y de ideas antiguas y obsoletas. Sé que pronto me llegará el día en que mi sueños se hagan realidad, hasta entonces seguiré contabilizando con infinita paciencia e infinito amor pues gracias a mi trabajo mantengo a mi hijo y a mi misma. En mis ratos de ocio seguiré trabajando fuertemente para lograr mis objetivos y construirme un mundo como yo deseo. Dentro de poco mi mundo interior y exterior se acercarán y ya no habrá una división tan fuerte entre ambas... Ahora es tiempo de volver a mis queridas facturas. Si tu caso es parecido al mío, ama tu trabajo y nunca, nunca dejes de soñar... algún día tus sueños se harán realidad.