¿Cuento o relidad?
Al hilo de la última entrada quiero transcribir un cuento que oí este fin de semana pasada en un curso al que asistí, dice así: Cuentan que hace miles de años existía un mago que tenía fama de poder pedirle cosas a Dios y que este siempre se las concedía. Es decir, tenía es poder de realizar milagros, cosas inexplicables a la razón humana. Este mago tenía un ritual para hacer sus peticiones; hacía una hoguera en el bosque, ponía flores y empezaba con su discurso a Dios, pero lo decía tan bajo que nadie escuchó nunca las palabras exactas que expresaba. El caso es que el universo, Dios, las energías, la naturaleza o vaya usted a saber qué, se lo concedía. Cuentan también que ese mago murió sin transmitir a nadie su sabiduría, entonces las personas de la aldea se reunieron con la intención de imitar al mago; hicieron una gran hoguera, pusieron flores y, con la total convicción de que se les confería lo que pidiesen, expresaron sus deseos, sus sueños. El caso es que el universo, Dios, las energías, la naturaleza o vaya usted a saber qué, le concedían aquello que pedía. El tiempo ha pasado y todo aquel conocimiento se ha perdido pero cuentan que cuando una o más personas tienen un verdadero sueño y que creen que ese sueño es posible y trabajan para que lo sea, el universo, Dios, las energías, la naturaleza o vaya usted a saber qué, se lo concede. Eso si, siguiendo el secreto de aquel mago; querer las cosas de corazón y no tener dudas de que nos llegará…
No hay comentarios:
Publicar un comentario