No me quiere... ¿de verdad?

Este fin de semana he aprendido algo muy importante, que puede hacerme la vida más fácil y alegre: "el que no me quieran como ya deseo ser querida no significa que no me quieran". Me explico; durante toda mi vida he sentido que ciertas personas muy allegadas a mi no me querían y esto me causaba mucho dolor. ¡Qué equivocada estaba! lo que pasa es que si que en quieren a su manera; para mi es importante decir te quiero, besar y abrazar. Para otras personas la manera de demostrar su amor es estando siempre ahí cuando los necesitas, dando un apoyo moral, monetario o de cualquier otro tipo. Generalmente tendemos a dar a las personas que amamos aquello que a nosotros nos faltó de pequeños, pues es lo que más valoramos. Si tienes un ser querido que sientas que no te quiere, o no te quiere lo suficiente, plantéate cómo te demuestra su amor, averigua qué carencia tubo esa persona de pequeño/a y compara ambos, tal vez descubras que lo que te está entregando es aquello que más valora y que más deseó tener. Pretender que nos quieran tal y como nosotros lo deseamos es no aceptar a los demás, es querer manipular e intentar que todo se adapte a nuestros pensamientos y expectativas. ¿Esto es amor o egoísmo?... Para la relación en pareja esto tiene un matiz diferente; antes de comprometernos con una persona es necesario analizar como nos sentimos a su lado, si no nos gusta su forma de querernos lo mejor es cambiar pues vamos a estar exigiéndole que cambie y que se adapte a nosotro/as con el consecuente deterioro de la relación. Eso si, una vez tomada la decisión del compromiso hemos de aceptarla tal y como es, sin manipulaciones, victimismo ni chantajes. Para eso sirve el noviazgo para sentir, escucharnos y ver si realmente esa persona nos puede hacer feliz. Tal vez este es motivo por el cual el universo nos deja elegirla, no como la familia, los compañeros de trabajo, los vecinos, los suegros :-),....