El nombre de Lucifer significa "el que trae la luz". Así se llamaba el ángel más brillante y perfecto que Dios creó para su gloria. Era perfecto, bello, sabio... "pero su corazón se elevó, debido a que se creía tan bello y por haber derrochado su sabiduría en todo su esplendor, por ello se ha precipitado al suelo...(Ezequiel 28, 12-17)
Lucifer no quería ser un ángel, deseaba dominar el cielo al lado de Dios, así se atribuyó así mismo la máxima autoridad. Esto derivó en un conflicto en el cielo; por un lado los seguidores de Lucifer y por otro los de Dios. Estas fuerzas, estaban enfrentadas, eran opuestas y, a la vez, tenían un mismo origen; la divinidad.
A los que se habían puesto del lado de Lucifer les quedaba dos caminos; volver al lado de Dios, o convertirse en una parte destructora del mal, que finalmente se destruiría a sí misma, ya que el mal no puede resistir a eternidad ni lo divino.
Las fuerzas de Lucifer son las fuerzas del ego, de egoísmo, de la separación y de los intereses individuales. Frente a la fuerza de Dios, de la naturaleza, o como lo desees llamar, que es la fuerza de la unión, la armonía y la conjunción de los contrarios, es el bien comunitario, frente al bien individual del ego. (Fuente; La fuerza divina de los Ángeles, Jeanne Ruland)
El ego es un dragón, es ese dragón mitológico con el que hay que luchar, no para destruir sino para convertirlo en nuestro aliado. Con cuántos dragones, luciferes, egos hemos levantado nuestras lanzas para nada !! Y ahí están en peligro de extinción porque cuando los egos mueran ya no quedará humanidad, hemos de conservalos y cuidarlos, para enseñarles a elevarse por encima de las miserias humanas. Ese día brillará la luz.
ResponderEliminarFeliz Equinoció de Invierno bruji
Cariños