martes, 1 de abril de 2008

Salir de la zona cómoda del victimismo

Hoy soy consciente de que cuando me siento víctima de mis circunstancias lo que estoy haciendo en meterme en mi zona de comodidad y quedarme allí; el más fácil quejarme que abordar el problema. Es más fácil ser víctima que ir de cara y plantarse ante alguien y decirle lo que piensas.
El ego también tiene mucho que decir en todo esto pues es el y no otro quien nos manda señales como; !con lo que tu vales...!, ¡no te mereces esto!, ...
El refugio del victimismo nos hace prisioneros de una circunstancia no deseada.
Yo hoy he dado un paso de gigante, he dejado atrás mi orgullo y he dicho lo que sentía. Lo he dicho desde el corazón, sin dejar intervenir a mi ego. Y te puedo asegurar dos cosas; 1. He sido escuchado y 2. Me siento maravillosamente bien, me quiero y me respeto.
Tal vez mañana me regalo algo; ¡ya te lo contaré!
Estoy pensando que tal vez Jesucristo cuando dijo levántate y anda se refería a que dejes tu zona cómoda, que dejes de quejarte y emprendas acciones que te lleven a lo que tu deseas.
Tal vez si hoy viviera Jessucristo diría; "deja tu sillón, tu vida cómoda y lanzarte a hacer realidad tus sueños"

1 comentario:

  1. Este finde estuve en un retiro terapéutico. Se me hizo patente mi postura de víctima, yo creía que no, lo había disfrazado de tantas maneras..., ese terror a mí misma, a andar sola, a explorar mi vida... Hoy me sigue aterrando, pero siento curiosidad, y detrás del miedo hay ilusión y quizá un sueño escondido que pide vivir.
    Se me llamó cobarde, jolín cómo pincha, por estar como estoy. Pero ya va siendo hora de plantearlo de otra manera, llamando primero a las cosas por su nombre y no mantenerme alejada de mi vida. Un abrazo.

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