Ayer abría mi corazón y confesaba que la motivación a lo largo de mi vida fue el que me quisieran y que, de algún modo, esto sigue presente en mi. ¿Cuál fue el punto de inflexión en el que mi primera prioridad en la vida cambió? Mi separación. Al separarme me di cuenta del poco amor que me tenía a mi misma y que este era el principal factor para que necesitase tanto amor del exterior, de los demás. Así empecé a hacer cursos, a leer y a escribir. Comencé un romance por la vida conmigo misma. En este momento todo cambió, mi motivación principal ahora es mejorar internamente, es conseguir la vida que yo deseo, es ser feliz y dar felicidad a los que me rodean.
Ahora estoy conectada al amor que hay en mi, y honestamente puedo decir, que me es mas gratificante dar que recibir amor.
Este giro es maravilloso pues se ha producido un efecto boomeran precioso, cuanto más amor doy sin preocuparme de recibirlo, más lo recibo.
Hoy me quiero y esto me lleva a superarme día a día, a no tomar el camino fácil, a aceptar a los demás como son sin juzgarlos (confieso que esto aveces no me sale de forma natural, no estoy tan avanzada).
Hoy se que toda las motivaciones que son verdaderas son interiores y que están tienen un efecto en el exterior.
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